Sí, hacía eones que no posteaba en el blog, pero es un poco como ya dije: Seguir con un "diario", ya sea a través de la red o en un papel de tu casa (¿quedan de los que hacen eso?), es difícil. Pero bueno, de vez en cuando a uno le sale del alma postear para contar algo y hoy es ese día. Además, acabo de venir de comprar mi copia de World of Warcraft Wrath of the Lich King, así que doble felicidad. Ahora a ver si saco tiempo para jugar.
Pero no nos vayamos por las ramas. Si me he decidido a escribir ha sido porque hoy he descubierto, gracias principalmente a la página de videojuegos Meristation, el juego "World of Goo". Sí, ambos empiezan por "World of" pero me temo que poco tiene que ver uno con el otro. El caso es que entre el maremagnum de falta de originalidad y creatividad por parte de las empresas de videojuegos, de vez en cuando asoma un pequeño rayito de esperanza. Y digo "pequeño" no por la envergadura del proyecto, que meterse en el mundo de los videojuegos ya de por sí es arriesgado, sino porque la empresa de donde ha salido esta joyita es una empresa desconocida, 2D Boy Games.
Si bien visualmente nos podría recordar al conocido Loco Roco de la PSP, poco tiene que ver con él salvo que se trata de un juego de puzzles. Y ahora diréis "Bah, un juego de puzzles, fuerte coñazo". Craso error, ¿eh? Craso error. ¿De qué va la cosa? En un principio la cosa se nos plantea fácil: Tenemos a unos seres circulares llamados "Goos" y el objetivo es llevarlos desde el comienzo de la fase hasta una tubería de salida, al más puro estilo Mario (aunque de nuevo, poco tiene que ver una cosa con la otra). Estos seres son como gotas de petroleo, de colores oscuros, aunque a medida que avanzamos en el juego los vamos encontrando de distintos colores. ¿Y cómo los lleváis hasta el final de la fase? Tienen, entre otras, la particularidad de unirse entre sí para formar estructuras, que varían en función del peso de cada Goo. De modo que, a forma de torres, vamos montando nuestra estructura para "encaramarlos" hacia el final de la fase. Sigue pareciendo sencillo, ¿eh? Pues ya veréis cómo os acordáis de todos vuestros antepasados cuando, a menos de 1 metro de la tubería, la estructura se os venga abajo por un mal contrapeso.
Es una delicia comprobar que hay compañías que, sin dejarse influir por la moda del videojuego gráficamente colosal, se centran en contarte algo, en llevarte a alguna parte, en hacer que te comas la cabeza y, sobre todo, en divertirte por encima de todas las cosas. Con una música fabulosa y una historia la mar de divertida es un juego que, a mi parecer, se puede catalogar de "excelente" en una época en la que los gráficos parece que lo sean todo y si no, no son "Hard Games". Probadlo, no voy a poner capturas porque me parece que es un juego que hay que descubrir. No os arrepentiréis, os lo aseguro.
Pero no nos vayamos por las ramas. Si me he decidido a escribir ha sido porque hoy he descubierto, gracias principalmente a la página de videojuegos Meristation, el juego "World of Goo". Sí, ambos empiezan por "World of" pero me temo que poco tiene que ver uno con el otro. El caso es que entre el maremagnum de falta de originalidad y creatividad por parte de las empresas de videojuegos, de vez en cuando asoma un pequeño rayito de esperanza. Y digo "pequeño" no por la envergadura del proyecto, que meterse en el mundo de los videojuegos ya de por sí es arriesgado, sino porque la empresa de donde ha salido esta joyita es una empresa desconocida, 2D Boy Games.
Si bien visualmente nos podría recordar al conocido Loco Roco de la PSP, poco tiene que ver con él salvo que se trata de un juego de puzzles. Y ahora diréis "Bah, un juego de puzzles, fuerte coñazo". Craso error, ¿eh? Craso error. ¿De qué va la cosa? En un principio la cosa se nos plantea fácil: Tenemos a unos seres circulares llamados "Goos" y el objetivo es llevarlos desde el comienzo de la fase hasta una tubería de salida, al más puro estilo Mario (aunque de nuevo, poco tiene que ver una cosa con la otra). Estos seres son como gotas de petroleo, de colores oscuros, aunque a medida que avanzamos en el juego los vamos encontrando de distintos colores. ¿Y cómo los lleváis hasta el final de la fase? Tienen, entre otras, la particularidad de unirse entre sí para formar estructuras, que varían en función del peso de cada Goo. De modo que, a forma de torres, vamos montando nuestra estructura para "encaramarlos" hacia el final de la fase. Sigue pareciendo sencillo, ¿eh? Pues ya veréis cómo os acordáis de todos vuestros antepasados cuando, a menos de 1 metro de la tubería, la estructura se os venga abajo por un mal contrapeso.
Es una delicia comprobar que hay compañías que, sin dejarse influir por la moda del videojuego gráficamente colosal, se centran en contarte algo, en llevarte a alguna parte, en hacer que te comas la cabeza y, sobre todo, en divertirte por encima de todas las cosas. Con una música fabulosa y una historia la mar de divertida es un juego que, a mi parecer, se puede catalogar de "excelente" en una época en la que los gráficos parece que lo sean todo y si no, no son "Hard Games". Probadlo, no voy a poner capturas porque me parece que es un juego que hay que descubrir. No os arrepentiréis, os lo aseguro.
