sábado, 16 de febrero de 2008

Sweeny Todd

Igual que el día 14 de febrero es San Valentín, ayer en España, día 15 de Febrero fue San ValenTIM (chiste malo no jutsu!!). Como era de esperar, y siendo mi novia fan hasta la médula ósea de Tim Burton, ayer me iba a tocar ver la última de sus películas: Sweeny Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet. Esta película musical está basada en un musical de Broadway del mismo nombre, que a su vez está basado en una serie de obras inglesas. A grosso modo, Sweeny Todd nos cuenta la historia de Benjamin Barker, un joven barbero que vive feliz con su esposa y su recién nacida hija. Un día, el juez Turpin, locamente enamorado de su esposa por su belleza, decide condenar a Barker por un falso delito, enviándolo a realizar trabajos forzados en Australia. Tras 15 años, el barbero regresa a Londres, ávido de venganza, con la intención de cepillarse a hoja de navaja de afeitar a todo aquel que le arrebató su felicidad bajo su nueva identidad: Sweeny Todd.


Y bien: Eso es todo. Pese a que la estética de la película está muy bien lograda, su alta duración (casi 120 minutos de metraje) para lo que pretenden contar la hacen larga de digerir si no eres fan de este hombre. Las canciones del musical se conservan tanto en melodía como en letra y, para no decir que todo es malo, es un gran acierto que nos hayan conservado el idioma original a la hora de cantar como ya hicieron, por ejemplo, en Hairspray, etcétera. Sin embargo, el acabado de la película me pareció deficiente y, pese a que Tim Burton no se interese demasiado por estos temas, la integración de lo digital con lo cinematográfico no funciona y la mayoría de decorados en 3D parecen pegotes mal puestos. Tratando de ser fiel al musical, supongo que había que dejar todas las canciones del mismo, pero para el corto argumento de la película, más de un tema se podría haber suprimido perfectamente y llega a agobiar ver hasta al ratón de la esquina cantando sus desgracias.

El papel de Johnny Depp, sin embargo, está a la altura y muestra una gran voz, cosa que seguro que más de uno no se esperaba, sobre todo sabiendo que, como ya es habitual, el amigo Tim lo "fichó" sin escucharle dar ni una sola nota. Lo que me habría reído si llega a tener voz de cola de gato pisado. Lo que pasa, y pese a que digan que es un actor que no está encasillado, es que su abanico de papeles se reducen a estos personajes tan extraños, osea que por mucho que me quieran decir que no, es otra forma de encasillamiento (sí, aunque también haya tenido algún papel "no extraño"). Por otro lado, a la que sí que no soporto es a la esposa de Tim Burton, a la Helenita. Os juro que no he visto actriz más sosa en mi vida. La veas donde la veas, siempre tiene el mismo careto y hace el mismo tipo de papeles sosos y aburridos con una especie de toque maquiavélico. Ya se lo decía ayer a mi novia: "Es que la puedes poner haciendo el idiota detrás de Depp, que no va a parecer rimbombante."

Sin embargo, pese a que Tim Burton la habrá escogido por ser un musical que le gustaba mucho, me parece la película más impersonal suya. Lógicamente, debe ser un tanto impersonal, ya que te estás basando en algo ya creado, pero creo que, siguiendo la línea de este guionista/director, parece más una simple adaptación a la pantalla grande que una "versión" propiamente dicha del mismo. No "respiras" el aire de Tim Burton mientras estás viendo el filme nada más que en el aire macabro de las calles y la escena de los deseos de la señorita Lovett, que tiene unos colores muy característicos del mismo. Por otro lado, además, cuando termina la película no "sientes" ese aire de misticismo que te contagia la peculiar visión de Burton y mi sensación fue de haber visto un musical gore y nada más: Ni moraleja, ni una experiencia "agradable" propiamente dicha, ni nada.

Sobre el resto de la película, pues no tengo nada que decir, salvo el fantástico papel de Adolfo Pirelli, el poco de gracia que necesitaba la película, se lo da Sacha Baron Cohen. En resumen, que si eres fan de Burton o ya la has visto o la verás en breve y te gustará, pero si no, pues hay cosas mejores que ver (aunque últimamente cada vez menos).


Soy Tim Burton... (No me lapideis demasiado)


Nos leeremos en futuras entradas... si sobrevivo a ésta.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Pobrechito Pedrito mío, que siempre se tiene que tragar las pelis de Tim Burton con su novia xDDDDDD

Cada uno tiene su punto de vista, está claro. Lo que no puedo desmentir es que me haces reír con tu sinceridad y tu forma de exponer las cosas. Es genial xD

Pobre Helena. Si no es vapuleada le has metido.

En cuanto a Tim Burton... me pasa un poco como con Anne Rice y George Lucas. Se lo perdono todo. Aunque me haya gustado la peli ^^

Krysia dijo...

Yo protesto... a mí el musical me encanta. Y ya le han quitado la mitad de las canciones (entre ellas la más entrañable, "La balada de Sweeny Todd", en la que los muertos se cagaban en Sweeny Todd por haberlos asesinado). Alan Rickman lo borda (cómo no) Johnny también y, lo admito, Helenita tiene voz de engranaje desgastado. Es la que menos me gusta y con mucha diferencia. Y lo triste es que el cásting no lo hizo Tim Burton, sino el creador del musical, Stephen Sodenheim. El único que era fijo (y si no Tim se negaba a rodar) era Johnny Depp, y Sodenheim le hizo cantar durante un buen rato hasta que quedó satisfecho.